Una forma diferente de hacer cocina. Cuando llegamos nos encontramos con la selección española de hockey celebrando sus medallas de plata y oro, discursos imposibles y un jaleo que molestaba a todo el mundo, incluído al cocinero jefe, Paco Guzmán, quien imagino es el promotor de todo esto. Dos locales en Barcelona y una reciente página completa en La Vanguardia. Al entrar me recibió un chico super amable, Alain Navarro, y a continuación otro chico, increíble, me llevó hasta el que sería mi sitio. El local, tanto en el exterior como en el intererior tiene algo que lo hace diferente, por ejemplo la iluminación o los camareros que se sientan contigo para explicarte lo que hay y ver qué es lo que te apetece. Comenzamos con una degustación de entrantes super chic, que no coinciden con los que estan en la página web y que para ser lo que son, no resultan especialmente caros. De segundo unos tagliatelli de marisco con una salsa buenísima, un rodaballo espectacular y un cochinillo no tan bueno como el del Passió Ibérica. Entre los dos restaurantes hay muchas similitudes, cada uno en su estilo. Los postres realmente diferentes: tocinillo de cielo de fruta de la pasión, cafe y helado de maria luisa y un soufle de pistacho con infusión de especies y helado yogurt-lima. Para beber un Enate con mucho cuerpo. Nos salió por unos 75,90€.
Tienen menú de mediodía
93 309 70 78
www.santamania.info
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