
Ayer nos encontramos con una amiga delante de la
Sagrada Familia para ir a tomar una copa.
La verdad es que no hay muchísima oferta para salir en el barrio, pero algunos lugares sí que hay.
Subimos en la
Avenida Gaudi y nos sentamos en la terraza del
Copa Cafe, un bar muy estándar con música Rock y World,
algunas tapas y unos cócteles. Al cabo de dos minutos, empezó a llover algunas gotas gordas y, pensando que iba a caer mucho mas, entramos en el local en busca de un techo.
El trato era bastante agradable, aparte una camarera un poco fría y sin mucha atención por sus clientes.

No quedamos ahí un buen rato y al salir nos decidimos a ir para una ultima copa en el
Samba Brasil, un
bar brasilero que hay en la calle Lepant, a dos pasos del otro.
Aquí es otro rollo: Se siente el calor
latinoamericano, la gente habla mas fuerte, el trato es agradable.
Al principio del servicio, preparan una montaña de
caipirinha (No es exagerado, empilan un montón de vasos rellenos) que va desapareciando a medida de la noche.
La decoración es bastante cutre, principalmente hecha a base de cuadros de fotos y recuerdos del equipo nacional “brasilenho”, y las paredes nudas crean una resonancia que amplifica el ruido ya fuerte de las voces.
Recomandado el
Mojito Kiwi: “Sano”, nutritivo y delicioso! :o)
Los cocteles cuestan entre 5 y 6 euros.